Inversión en Fideicomisos: todo lo que hay que saber para invertir en fideicomisos financieros. Entérese porqué operar con fideicomisos puede tener muchas ventajas: ofrecen altas tasas de rendimiento, suponen muy bajo riesgo y son ideales para inversores tradicionales.
¿Qué es un Fideicomiso?
El Fideicomiso es una figura jurídica referida a un contrato a través del cual una persona transmite bienes, dinero o derechos de su propiedad a otra persona para que ésta lo administre. Fiduciante se denomina a la persona que transmite los bienes. El fiduciante es el titular de los créditos cedidos al fideicomiso
La persona física o jurídica que recibe los bienes se denomina Fiduciario. Es quien custodia y administra los bienes fideicomitidos y debe estar inscripta en el Registro de Fiduciarios financieros.
Los Beneficiarios son los que reciben los beneficios del fideicomiso. Son los propietarios y titulares de los certificados de participación y de los valores representativos de deudas de los bienes transmitidos.
Dentro del fideicomiso se emiten valores representativos de deudas. El valor representativo de deuda es un derecho a cobrar lo producido por el fideicomiso. Pueden existir varios, con diferentes condiciones de pago. Los poseedores de certificados de participación tienen derecho al cobro de lo producido por el Fideicomiso financiero. Pero esto se dará una vez cancelados los compromisos asumidos por los valores representativos de deudas.
Los Fideicomisos se pueden clasificar en Fideicomisos ordinarios y Fideicomisos financieros. Los financieros son similares a los clásicos. La diferencia es que en este caso, el fiduciario corresponde a una entidad financiera o a una sociedad autorizada a actuar como fiduciario financiero.
El Fideicomiso financiero es una alternativa de inversión con rendimientos atractivos, tasas más bajas que otras alternativas tradicionales y poco riesgo.
¿Qué bienes pueden ser fideicomitidos?
Los bienes fideicomitidos deben estar especificados en el contrato y pueden ser cualquier derecho o bien perteneciente a una empresa que puedan ser transferibles. Entre ellos, acciones, cuotapartes, pagarés, letras de cambio, cheques, préstamos personales, cupones de tarjetas de crédito y derechos de cobro.
Inversión en Fideicomisos: rentabilidad y riesgos
Los bienes afectados al Fideicomiso no corren el riesgo comercial del fiduciante ni del fiduciado. Ningún acreedor de estas personas podrá perseguir el patrimonio colocado en fideicomiso. Es un patrimonio independiente y separado del balance de una empresa. Tampoco puede ser afectado por una quiebra.
En Uruguay, esta figura jurídica esta regulada por el Banco Central (BCU).
La rentabilidad está dada por lo que se pacta en la redacción del contrato de Fideicomiso. Allí se detallarán la tasa de interés, que puede ser fija o variable y las condiciones de pago.