Google ha confirmado una significativa inversión de USD 850 millones para la construcción de un nuevo centro de datos en Uruguay, lo que subraya el compromiso económico de la compañía con América Latina y refuerza la visión de Uruguay de convertirse en un centro de innovación y tecnología. Esta inversión, que es una de las más importantes en infraestructura tecnológica en la región, permitirá a Google fortalecer su red global de centros de datos, mejorando la eficiencia y la disponibilidad de sus productos y servicios, como el Buscador, YouTube, Maps y Workspace, que incluye aplicaciones como Gmail, Docs y Sheets.
El nuevo centro de datos se ubicará en el Parque de las Ciencias, en Canelones, y formará parte de una extensa red global de Google, que ya cuenta con 28 centros de datos en todo el mundo y 40 regiones de Google Cloud dedicadas a servicios en la nube. Este será el segundo centro de datos de la compañía en América Latina, después del que se inauguró en Quilicura, Chile, en 2015. Además, Google ya cuenta con otros proyectos en la región, como los centros de Google Cloud inaugurados en San Pablo en 2017 y en Santiago de Chile en 2021, y próximamente abrirá otro en Querétaro, México.
Eduardo López, presidente de Google Cloud para América Latina, destacó que esta inversión refleja una «apuesta sostenida» de la empresa por la región, enfatizando las capacidades de Uruguay en términos de infraestructura confiable y talento local calificado. Según López, «Uruguay ha dado importantes pasos tanto en el desarrollo de infraestructura confiable como en la capacitación del talento local, lo que lo convierte en un socio ideal para este proyecto». También subrayó que la creación de nuevos centros de datos ofrecerá una «conectividad mayor y más confiable» no solo para Uruguay, sino para toda la región. López añadió que cuando Google decide construir un centro de datos, se compromete a generar un impacto positivo en las comunidades locales, fortaleciendo las economías regionales y creando oportunidades de empleo.
El ministro de Relaciones Exteriores de Uruguay, Omar Paganini, expresó su satisfacción por la concreción de este ambicioso proyecto, que representó un esfuerzo conjunto entre el gobierno y Google. Paganini enfatizó que Uruguay tiene una «vocación» como hub de innovación tecnológica y que el país está abierto a recibir proyectos de compañías que miran al futuro. «Uruguay tiene que estar muy abierto a los proyectos que vienen de este tipo de compañías, de emprendimientos que apuntan al futuro», señaló.
Paganini también destacó la estabilidad jurídica y las políticas constantes de Uruguay como factores decisivos para atraer inversiones a largo plazo. «Estos proyectos inevitablemente tienen que pensar a largo plazo. En Uruguay, las compañías pueden saber –y Google lo está demostrando– que las políticas van a continuar, que se van a mantener los regímenes, que las reglas de juego no cambian y, por tanto, una inversión como esta puede durar muchos años», subrayó.
Además de la estabilidad, Uruguay ofrece ventajas adicionales como la disponibilidad de electricidad 100% renovable, lo que diferencia al país de otros destinos para la construcción de centros de datos. Esto no solo representa un ahorro económico, sino también un compromiso con la sostenibilidad ambiental, un aspecto cada vez más relevante para las compañías globales que buscan reducir su huella de carbono. Paganini planteó que «¿por qué no soñar con una industria de data center uruguaya? Más ahora, que la inteligencia artificial demanda cada vez más poder de cómputo y cada vez más cerca del usuario final. En América Latina hay un déficit de data centers».
La construcción del nuevo centro de datos de Google en Uruguay se desarrollará en cuatro etapas y se espera que tome alrededor de 26 meses, generando entre 300 y 400 empleos durante la construcción, con un pico que podría alcanzar los 800 trabajadores. Una vez que el centro esté operativo, se estima que habrá alrededor de 50 puestos de trabajo permanentes. Esta inversión, que inicialmente fue anunciada durante el gobierno de Tabaré Vázquez en 2019 y reafirmada bajo la administración de Luis Lacalle Pou en 2020, enfrentó incertidumbres a mediados de 2023 cuando surgieron rumores de que Google podría retirarse del proyecto. Sin embargo, en noviembre del año pasado, representantes de Google se reunieron con funcionarios uruguayos y confirmaron su compromiso con la inversión.
Este centro de datos no solo representará un avance significativo en la infraestructura tecnológica de Uruguay, sino que también posicionará al país como un líder en la región para futuras inversiones tecnológicas, consolidando su reputación como un lugar seguro y atractivo para el desarrollo de proyectos de alta tecnología. Con la demanda global de servicios en la nube y la inteligencia artificial en constante crecimiento, Uruguay se encuentra en una posición única para aprovechar estas tendencias y atraer más inversiones en el futuro.